Otras Historias

Con las "Otras historias" se completa la tríada de los textos más jóvenes de Lúcido.

Con las "Otras historias" se completa la tríada de los textos más jóvenes de Lúcido. En la Historia de un abuso Corazón de madera. Se refleja la situación traumática en la juventud de un artista. Relata el encuentro con un viejo "enemigo" llevándolo a una situación extrema y no deseada. El protagonista es testigo del abuso sexual de una joven, de la cual se enamora a primera vista. Aquí, Lúcido narra de una manera lineal circunscribiéndose a los hechos. Sin dejar por ello de revelar el contraste de alguien sensible e indefenso, opuesto a la bestia humana que llevamos todos dentro. Remarcando el triunfo de la fuerza salvaje por sobre el amor, y la intimidación por encima de la paz. Destacando de que manera la manada humana se somete al terror del poderoso, quien ejerce la violencia sin límites dominando a través del miedo. Con tal de pertenecer a la jauría, sus integrantes obedecen, sin que ninguno se anime a enfrentarlo. En esta situación límite, no hay héroes ni heroínas que puedan hacer visible la imposibilidad de vencer el pánico. En la Historia de un suicidio Ellos. Él le había dicho: 'Haz lo que quieras, ten amantes, viaja, … lo que quieras; pero déjame cuidarte". Un amor platónico. Aquel que no puede amar, dirigiéndose alguien que no se deja amar. Seres que nacen muertos, incapaces de sentir. Racionales, convienen en que hay otras formas del amor persuadidos que la pasión conduce a la muerte física. En este caso una defunción planificada en detalle por la víctima. El final deja entrever que solo los héroes y las heroínas pueden vencer situaciones de poder y de control, para encontrarse en el amor. Personajes que se juegan en una batalla cotidiana, abandonados a sus almas perturbadas y desnudas. Uno frente al otro. En Historia de un crimen Lo que no se quiere ver. Queda abierta a la percepción del lector una pregunta de orden secreto y esotérico, buscando un enigma que explique el crimen, en una secuencia y un orden inusual. Una clave indescifrable. Finalmente, la creatividad del lector abrirá el camino que resuelva aquel enigma. En la Historia de un incendio El humo. La descripción de una tragedia accidental en el medio de la barbarie de la guerra. Lúcido describe en detalle la desesperación de los pobladores y los animales que, obligados, huyen del fuego arrojándose al río envuelto en llamas. Mientras los asesinatos continúan en conjunto, acompañando las batallas que nunca tienen fin. Una madre con sus hijos intenta huir despavorida, abandonando al abuelo y su adorado gato a la merced de las hogueras. Sobre el final solo queda el humo. En la Historia dedicada al hombre La última causa. Se desarrolla durante el Domingo de Pascua. Un hombre llega a la comisaría del barrio, ofreciendo una denuncia. Se enfrenta con un oficial comisario de cuerpo enano, que compite con otro oficial de la policía, alto, carismático y de mejor apariencia física que la suya. El personaje presenta una denuncia sobre el comercio de estupefacientes en la zona denominada "La placita". Luego de conversaciones burocráticas que no llevan a ninguna solución, queda a la vista lo absurdo del poder administrativo y el escenario de las clases sociales que lo sostiene. La Historia de un accidente. Una niña de Rio de Janeiro. Trata del encuentro entre dos viejos amigos. Un hombre argentino y una mujer brasilera, que se reúnen regularmente para hablar de amor y sexo, Usualmente es la mejor excusa que el argentino encuentra, para poder escuchar la narración de Ana Luisa, su amiga y camarada de años, que describe de una manera muy particular dejándolo totalmente embelesado, cada vez que Ana Luisa relata las vivencias de su infancia. Niñez totalmente diferente a la de él. Fascinado por los hechos, que van transcurriendo de una manera especial. Refiriéndose a la disfuncionalidad de la familia brasilera de Rio de Janeiro a la cual pertenece su mejor amiga de la infancia, Dulce. Con la cual todavía conserva lazos de profundo afecto.

Lucido del Alba nació en Argentina, Paraná de las Palmas, en la Isla de los Espíritus (cementerio de los fallecidos por la fiebre amarilla), en el cruce de los ríos Sarmiento y el Lujan. No se sabe en que año ya que nunca fue inscripto en el registro nacional de las personas. Su familia lo abandono en las aguas mientras su hogar era inundado, junto a su hermano mayor en la precaria construcción de madera, quedando atrapados en la habitación de los altos que se salvo de ser arrasada por la fuerte corriente de agua. Lo sobrevivió su hermano mayor que tomo cuidado de Lucido, desde la niñez hasta su partida en el año 1991. Lo mantuvo encerrado, en esa habitación cuadrada donde el mobiliario consistía en una mesa cuadrada de diferente tamaño, pero de la misma proporción. Una banqueta de madera, cien cajas de los lápices negros y una enorme pila de papel para envolver, donde Lucido escribía recibiendo sus mensajes telepáticos provenientes de una tele blanco y negro, que funcionaba a través de un generador a gasolina. Cuando no escribía caminaba alrededor de la mesa. Siendo adulto, repentinamente en un atardecer, decidió cambiar de ruta y camino en línea recta, cargando en una vieja mochila, (que conservo durante toda su vida) sus manuscritos. Con el cargamento de estos papeles, casi desechos por el tiempo, se dirigió a la salida. Desde ese punto de partida y siempre continuando en la misma línea y en la misma dirección llego a la frontera de Argentina, Brasil y Paraguay a un pueblo llamado Tres Fronteras, en Puerto Iguazú, provincia de Misiones. Allí lo vieron por ultima vez. Antes de desaparecer el guardia de la frontera lo obligo a entregar el paquete con los manuscritos prohibiéndole el paso, si no lo concedía. Por un error del correo nacional llegaron a manos de un anciano, que los dono a un centro espiritista Kardec localizado en San Telmo, en la ciudad de Buenos Aires. Uno de los miembros descubrió el valor de estos escritos que hoy se conservan en una caja de cristal junto a su mochila y bajo estricta vigilancia, en el museo que lleva su nombre en los altos del rio Paraná de las Palmas, en la zona de Tigre, Provincia de Buenos Aires. Basándose en la idea central de sus creencias las autoridades del centro Kardec, decidieron romper con el silencio y darlos a publicar en el año 2017, sosteniéndose en sus principios fundamentales que indican como primera causa inteligente, la existencia y unicidad de Dios. Ser divino conjugado con el proceso natural que permite al espíritu volver a encarnar como humano con el fin de evolucionar (sea para perfeccionarse en virtudes, para expiar faltas pasadas o para ayudar a sus semejantes a progresar). Entendiendo que la evolución intelectual del humano solo puede reencarnar tanto en hombre como en mujer. Siendo Dios eterno, inmutable, inmaterial, único, todopoderoso y soberanamente justo y bueno. Bajo las creencias de estas ideas, equivocadas o no, los herméticos textos de Lucido se publicaron por primera vez. En la actualidad se siguen editando de manera artesanal reconstruyendo y reproduciendo los textos con la mayor fidelidad, seguramente incompletos por su lamentable trayectoria histórica. En algunos casos excepcionales se transmiten a través de la tradición oral mas antigua, lo que obliga al receptor a entrenarse de un modo mas sofisticado en el desarrollo de su audición Los miembros de este centro creen firmemente que Lucido el Alba aun sigue vivo en la selva paraguaya, ya que a veces perciben señales de su espíritu, en una forma de frecuencias que dictan sus consignas en el futuro, y a las cuales los miembros activos del centro obedecen de manera incondicional.